tantas noches he muerto que no moriré ya más.
Se escapa de mí el aliento - custodio de mi razón -
mientras el murmullo de la noche se derrama entre
la sombra.
la sombra.
Tu voz que dejó mil cicatrices se enmudece y cae de mi piel desnudándola de hiel,
y mi voz ...
solo garganta quebrada, fracturada por persistente soliloquio,
solo garganta quebrada, fracturada por persistente soliloquio,
viaja envilecida entre guarnición de caricias enmohecidas por atávicas ausencias.
Todas las quimeras que me hicieron prisionera,
abren del corazón las rejas
y yo que me hice silencio al amparo de las sombras,
no levantaré la voz para que no se despierte el eco de adioses madurados
en rescoldos del destino.
El amor huyó por los resquicios,
olvidadas quedaron las canciones no escuchadas
y despacio redimiendo mis dolores,
atravesaré el puente hacia donde duermen los amores despreciados.
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